Desde entonces
todo lo que ha pasado ha sido demencial. Como consecuencia de la destrucción de
empleo y de la falta de decisiones políticas ha aumentado la pobreza, el paro
está en niveles nunca antes conocidos, hay millones de personas en riesgo de
exclusión social más otras tantas ya marginadas socialmente. No hablo de drogadictos
ni expresidiarios o seres marginales, hablo de personas NORMALES que hasta ayer tenían su trabajo, su
profesión, gente que se levantaba por la mañana, que se tomaban un café en un
bar y se iban a trabajar para cobrar un salario a final de mes y en agosto se
iban de vacaciones una semana a la playa y dos al pueblo.
Gente expulsada
de sus hogares por no pagar la hipoteca, gente a la que se le corta la luz y el
agua porque no tienen para pagar. Gente que están empezando a saber que es
pasar un invierno sin calefacción. Casos de malnutrición de niños, recortes
brutales en servicios básicos y esenciales. Una reducción de salarios criminal
que en una sociedad justa sería motivo de revolución, mientras los precios no
dejan de subir y encima hay que oír sandeces del impresentable buitre carroñero
de Cristóbal Montoro diciendo que los salarios no han bajado.
La gente ya se
ha mentalizado que la crisis no es pasajera como en otros países donde ya casi se
ha superado. Aquí no, aquí ha venido para quedarse durante mucho tiempo. Y el
PP de Marianín amenaza con prologarla 10 o 15 años más. Eso si, la crisis no es
para todo el mundos, los ricos se han hecho más ricos, los pobres más pobres, y
mientras el carnicero que cierra porque la gente no tiene ni para comprar carne
las marcas de coches de lujos, por dar un ejemplo, ya miran la crisis por el
espejo retrovisor.
Hace unos días
esperando a que llegara mi abuelo, estaba en la calle con mi padre a las
puertas de una carnicería de toda la vida. Una carnicería que de siempre ha
estado llena fuera la hora que fuera- Pues bien, en torno a las 7 de la tarde y
en los veinte minutos que estuvimos esperando tan solo entró una persona a
comprar.
Y mientras pasan
cosas así hay planteada en toda regla
una amenaza de separación de un territorio español con total impunidad de los
desgraciados que la promueven que se saben con la espalda cubierta, mientras
cientos de presos, asesinos, etarras y violadores están siendo puestos en
libertad ante la mirada atónita de toda España. Y suma y sigue.
La seguridad
ciudadana está bajo mínimos. A la mínima te abren el coche para robarte lo que
hay en su interior sino se llevan el coche, o te sacan una navaja para robarte
lo que lleves, o a la buena mujer que va a la compra la meten un tirón en el
bolso o en los pendientes o en el collar. Si no lo digo exploto: ESTO CON
FRANCO NO PASABA.
Ante este
panorama uno se pregunta cómo aun no ha habido un estallido social que obligue
a cambiar la política de quien gobierne. Yo siempre me he planteado cuanto
puede aguantar un país como España con 6 millones de parados. Es como el
currante que durante un tiempo determinado trabaja 14 horas al día para mantener
a su familia. Puedes aguantar un tiempo, un mes, dos, quizás tres, pero tarde o
temprano esa persona va a reventar. Con España pasa igual. No podemos vivir 10
años más con 6 millones de desempleados. Toda esta gente el día de mañana
cobrará de pensión 400 euros. Con ese dinero al precio que está todo hoy día a
mi modo de ver se puede sobrevivir, pero no vivir.
Los ahorros de
la gente se empiezan a terminar y no se ve solución por ningún lado. Todo lo
contrario: solo vemos impuestos, multas a diestro y siniestro, corrupción,
mismamente para empezar el año 2014 ya se ha anunciado otra subida de la luz
espeluznante. Otra más. Es tremendo todo.
Eso la gente que
no tiene trabajo, algunos de los cuales llevan 3, 4 y 5 años en el paro sin
ayuda ni prestación.
Del otro lado
hay que contar con la gente que trabaja pero que cobra sueldos tercermundistas
y directamente los que también trabajan per no cobran salario alguno, pues
muchas empresas se aprovechan de estos trabajadores (becarios, prácticas en
empresas sin remuneración con posibilidades de incorporación, etc…).
Los que aun
mantienen su trabajo no saben si el mes que viene podrán cobrar, si la empresa
entrara en concurso de acreedores en breve o si en dos meses estarán inmersos
en un ERE/ERTE o sabe Dios qué. Ya del pobre autónomo ni comentar….Bastante
tiene con pagar a Montoro, que bien podría interpretar a sanguinario vampiro en
la próxima película que se haga sobre esta temática.
Leía el otro día
en la contraportada de un libro sobre economía en un centro comercial que las
pantomimas de que la economía tiene que ver con el clima, con la gente y demás
es mentira, que lo que tiene que ver es el tipo de gobernantes que hay y las
políticas que aplican. Creo que puede tener mínimamente algo que ver, pero
efectivamente son excusas de mal pagador. Aquí lo que tiene que ver es la
política y los gobernantes. Que leches.
En España
tuvimos a un (llámenlo como quieran) y ahora tenemos otro (llámenlo como
quieran, iba a decir zoquete siendo muy generoso) que han aplicado una política
destructiva en un escenario de crisis, que es la subida de impuestos
indiscriminada para salvar a toda costa a los ricos, a los bancos, a las
empresas y sobre todo a la clase política y sus privilegios. Una subida brutal justo
en el momento en que nadie tiene dinero donde lo que se debería hacer es bajar los
impuestos, mantener los servicios básicos y recortar dinero de donde se debe
recortar, que no son pocos sitios ni poco dinero. Blanco sobre negro señores.
Yo defiendo una
política austera, pero por política austera entiendo gastar dinero en cosas
necesarias y no despilfarrar en estupideces ni en lujos. Eso es austeridad.
Gastar en lo que realmente merece la pena. ¿De qué vale que 4 alcaldes
renuncien a su coche oficial si luego llega Mariano o Zp y le dan no se cuantos
mil millones al malnacido de Arturo Mas para que siga manteniendo el
despilfarro nacionalista?
Con esta
política brutal de recortes y de subida de impuestos y atraco al ciudadano sin
disimulo no se hace más que prolongar el sufrimiento y retardar la llegada de
la ansiada recuperación. De hecho es muy triste que nuestros dirigentes han
asumido que para salir de esta situación es irremediable el empobrecimiento
general de la sociedad.
Pero aún hay
más: los responsables de la situación que tenemos se han ido de rositas (véase
el pesebre sociata) o siguen trincando impunemente (Rubalcaba CCOO UGT etc…),
mientras que todo el peso de la crisis está cayendo sobre la clase media en
claro riesgo de desaparecer. Clase media creada durante el franquismo y que a
mi juicio siempre lo he dicho fue el mayor logro conseguido por el Régimen
franquista, crear una clase media con un estado de bienestar aceptable. Con el
odio que tienen contra Franco es normal que quieren acabar con la clase media,
el mayor logro aún seguía en pie.
Partidos, sindicatos, banqueros, patronal etc…
Todos se lo han llevado crudo con total impunidad. Eso mientras las cúpulas
directivas de las empresas y las propias empresas siguen aumentándose año tras
año sus enormes sueldos o la clase política mantiene a toda costa sus
privilegios tan solo haciendo algún pequeño gesto únicamente de cara a la
galería.
La sociedad, la
España de a pie ha asumido que no hay esperanza, que la crisis está aquí
instalada y de momento no se va y se habla de normalizar la situación en 10-15
años. Sabe Dios dónde estaremos dentro de todos esos años….. Algunos ya ni
vivirán.
De quien
gobierna actualmente, el PP con Mariano y Montoro a la cabeza intervenidos
desde Europa por gente sin sensibilidad alguna, poco puedo añadir que no haya
dicho ya. Una ineficiencia pasmosa acompañada de grandes dosis de corrupción y
desvergüenza y abuso de poder, chantajeados desde prisión por un tipo que lleva
robando 25 años en el PP y carentes de cualquier empatía por la gente a la que
gobiernan. Con echar la culpa al pesebre sociata parece que está todo
exculpado.
Uno se pregunta
con este panorama nacional de desastre de norte a sur y de este a oeste como no
se produce un estallido social que eche a toda la banda de gentuza instalada en
el poder para poner a gente preparada, competente y honrada que no deba nada a
nadie para asegurarse un puesto el día de mañana en otro lugar (por ejemplo una
empresa eléctrica).
Pero si entramos
más en el fondo del asunto vemos que tampoco hay alternativas claras al sistema
actual. Buenos si las hay, pero uno no puede ir en contra del mundo en general.
Yo he leído a muchos
críticos, economistas y políticos, cada cual con su receta para sacar a España
de la ruina. Dudo de todos ellos la verdad.
Pero también hay
que decir que al igual que uno no puede ir en contra de todos los demás, dentro
de nuestras posibilidades si hay cosas, muchas cosas por hacer, empezando por
aniquilar de raíz el mayor cáncer que vive España: el sistema autonómico. Hasta
Hollande el adúltero se está planteando reducir las regiones en Francia.
La gente ya está
dominada por la rabia y la desesperanza, es patente en la calle el rechazo a un
sistema político y económico que asfixia a la sociedad, pero no hay un
movimiento organizado y real que se presente como una alternativa. El sistema
se sabe a salvo y seguro pese a las canalladas que nos infligen, como la subida
de la luz cada dos por tres.
Los únicos que
se manifiestan son los terroristas de la extrema izquierda. Que Dios nos guarde
la cabellera si esta gente llegase a ostentar el poder.
Después, pese al
paro y al empobrecimiento general el país, como se diría de una forma de andar
por casa…va tirando. Un currillo por aquí de un mes, cuatro días por otro lado,
me sale una chapuza y me saco un dinerillo en negro, etc… el abuelo de su
pensión nos da un poco de lo que ahorra…Voy al pueblo y me traigo cosas que me
dan. En este plan se sobrevive.
Las democracias
consolidadas son extremadamente estables. Es muy difícil que en una democracia
consolidada pueda producirse una revolución. Vamos que una democracia lo
aguanta prácticamente todo y España es un claro ejemplo de ello.
Puede haber
estallidos puntuales de violencia o de rabia, pero sin que llegue la sangre al
río. En una democracia el Estado es muy poderoso y tiene medios más que de sobra
para sofocar una rebelión a no ser que esa rebelión venga instigada desde los
más alto cargos militares, y bien es sabido que a los Generales les cuesta
mucho mover el culo. Además España es un un país muy dividido en ideologías.
Vamos que es imposible ponernos de acuerdo los españoles pese a que todos
estemos sufriendo lo inimaginable.
De otro lado
muchas familias con propiedades, ahorros, pisos varios, familas que también sufren
la crisis y ver mermada su capacidad adquisitiva pero ni mucho menos pasas
miserias, no creo que estén dispuestas a arriesgar sus bienes, negocios y
bienestar, mermado bienestar pero bienestar al fin y al cabo, por una aventura
revolucionaria.
Una prueba
fehaciente es Madrid, llamado en los últimos años el manifestódromo, ya que no
había día ni hora sin una manifestación.
En Madrid nos
hemos hartado de sufrir manifestaciones de toda clase, y ahora empezando el
2014 la gente está empezando a dejar de manifestarse, porque la gente ha
perdido la ilusión, ha comprobado que todo sigue igual y que no cambia nada. El
sistema lo aguanta todo. La sensación que queda es: vale, manifiéstate, estás
en tu derecho, pero yo voy a seguir a lo mío con mi plan.
Otra prueba muy
clara es la ausencia de debate sobre la permanencia en el euro. La gente no
quiero riesgos ni experimentos y el conservadurismo, el “más vale lo malo
conocido que lo bueno por conocer” acaba imponiéndose.
El euro, una de
las mayores tomaduras de pelo, donde lo que valía 100 pesetas hoy pasó a valer
al día siguiente 166 pesetas, un 66% más, no así los salarios. Pero no hay
debate. Ni un solo país ha asumido el riesgo de largarse del euro.
La sociedad en
gran parte es consciente de la nefasta calidad de nuestros políticos, pero con
esto del Euro, la Unión Europea y todo este rollo muchas decisiones ya están
tomadas desde otras esferas superiores. Como vengo denunciando, la pérdida de
soberanía nacional, que es a lo que nos encaminamos. El Nuevo Orden Mundial.
El apoyo al euro
sigue siendo popular. Eso de “ser europeos” nos va. Y así nos va.
No puede haber
un estallido social porque la gente aún tiene mucho que perder lo que tiene. Un
estallido social se produce cuando la gente ya ha perdido todo y no le queda
nada por perder, salvo la vida.
A muchos jóvenes
nos han destrozado el presente y nos están robando el futuro, pero gracias a
Dios tenemos a nuestros padres y eso nos salva de no estar pidiendo en la
puerta de una Iglesia, pues otro punto muy importante para entender porque aun
no ha pasado nada son los lazos afectivos sobre todos en los países del
Mediterráneo. Aquí la familia lo aguanta todo. Nos odiamos, nos podemos llamar
de todo, pero al final la sangre y la familia lo puede todo y hacemos lo que
sea por nuestro hermano, nuestro primo, tío o padres. En EEUU por ejemplo el
carné de hijo se acaba a los 18 años y búscate la vida como puedas. Aquí no.
Aquí si Papá puede mantenerte prefiere que estés en casa a estar explotado en
un trabajo.
Una razón muy de
peso por la que no ha pasado aun nada es esa: la familia. La familia, base de
una sociedad, está demostrando en estos momentos su valía y su importancia. La
misma familia que se quieren cargar entro unos y otros.
Yo no creo que
se vaya a producir un estallido social en España. Ha habido, está habiendo y
habrá brotes de violencia o hechos aislados, sobre todo de la extrema izquierda,
tan aficionada al caos y la guerrilla urbana, pero no va a pasar nada, máxime
cuando creo que los peores momentos ya han pasado.
España está
dormida y aborregada, y hay una manada de españoles que deberían dormir en un
establo como borregos que son.
Lo dije y lo
repito: las cosas se arreglarán si los que deben hacer algo lo hacen, plantar
cara a las cúpulas de los partidos o crear otros nuevos, gente dispuesta a
trabajar hasta morirse por España. Y por supuesto dependerá de nosotros, los
españoles, que después de los políticos somos el principal problema de este
país venido a menos.
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